Cuando florezcan
los sakura.
-Jovencita… jovencita. –llamaba un viejo
vendedor ambulante a una joven de andar apurado y mirada soñadora.
-Tengo lo que usted necesita! –grito el viejo, al notar que la muchachita en cuestión no
daba luces de tomar su atención.
Ukio caminaba confiada por las calles del
centro de Nerima, estaba segura de haber visto a su
Ranchan con esa estúpida gatita.
-Cuando entenderá que Ranchan es mío! Espera a que encuentre a la muy resbalosa!
De pronto noto que algo molesto tiraba de
su manga, girándose bruscamente para atizar lo que fuera que la estaba
desconcentrando en la búsqueda del dueño de sus sueños.
-Plaf!!! –se
escucho hasta china.
En el centro de Nerima
se ve como poco a poco se concentra la gente con la finalidad de ver un espectáculo
único, un turista pregunta a alguien alrededor si esto ocurre con frecuencia, a
lo que muchas caras se giran para contestar que esto no es nada comparado con
lo que pasa cerca del Furinkan, incluso se oye a lo
lejos un espectador que dice algo de un doctor que enloquece si cierta señorita
se le acerca. El turista impresionado saca inmediatamente una cámara
fotográfica para plasmar las singulares imágenes que tenia delante.
Se observa a un anciano vendedor
ambulante aplastado contra el pavimento, mientras una linda chica pide
disculpas y trata de despegarlo del piso con una pala de okonomiyakis,
de repente a lo lejos se oye un grito que se aproxima, se trata de una
jovencita de cabello rojo en una trenza que tiene en su cabeza una singular
gatita, ella grita y grita pidiendo auxilio.
-Que monstruo dice que la persigue –Dice
un muy interesado observador. –suena como gaaa….to…oo.
La pelirroja en cuestión corre de un lado
a otro moviendo sus brazos con desesperación como si creyese que con estos puede
volar. La linda jovencita de la pala de okonomiyakis
se olvida de su victima que sigue aplastado al pavimento y corre tras la chica
pelirroja gritándole insolencias a la gatita.
Los gritos de repente desaparecen bajo un
fuerte golpe, la pelirroja a chocado contra un poste.
Todo regresa a la calma en las calles del
centro de Nerima, solo un entusiasma turista se
felicita de la gran idea de elegir como destino de vacaciones la fascinante y
trastornada Nerima.
-Ranchan, Ranchan!
Estas bien cariño? –Pregunta preocupada Ukio.
-Estar bien, golpe no ser suficiente para
lastimar airen de Shampoo. –Contesta Shampoo con una tetera en la mano –Airen
regresar a cita con Shampoo, no haber todavía ir a dar nuevas noticias a
bisabuela. –Dice melosamente la chinita a una desmayada pelirroja.
-Y que noticias son esas? –Dice Ukio con una ceja levantada.
-Que más ser?,
airen decir que amar y yo aceptar, pronto casar.
-Ranchan se va a casar conmigo, yo soy la
prometida bonita, su padre lo prometió!
-Airen casar con Shampoo yo ser más
mujer, hombres desear!
Las dos guerreras toman sus respectivas
armas y se colocan en pose de batalla, mientras la adorable pelirroja sigue
incrustada al poste y el viejo vendedor ambulante va en su séptimo sueño.
-Si yo ganar, tú no acercar a airen nunca
más!
-Trato hecho! La
que pierde se alejara de Ranchan para siempre!
–concuerda muy decidida Ukio, y la batalla comienza.
El poste donde se encuentra incrustada la
pelirroja emite un singular chasquido y una grieta cada ves más grande amenaza
con partirlo en dos… Plaf! El poste cae en la cabeza
de la bella durmiente.
-ahhh… que paso? –Susurra Ranma-chan sobandoce la
cabeza, de repente las ultimas escenas vividas reaparecen en su mente y con
ojos entrecerrados trata de buscar a la morada culpable de su anterior
desesperación.
-Me pareció que estaba Uchan –se pregunta Ranma levantándose lentamente del suelo,
no ve ni escucha nada fuera de lo normal ya que en ese momento la pelea por su
amor se esta efectuando unas cinco cuadras más abajo.
-joveeen…ciita! –el viejo incrustado en el pavimento musita.
-Y a usted viejo, que le pasó? –le pregunta Ranma-chan al
hombre una ves despegado del pavimento.
-Solo vi
estrellas de muchos colores –explica con miedo el viejo.
/El golpe lo trastorno/
piensa Ranma-chan observando como el viejo trata de
tocar invisibles estrellas…
-Ya se encuentra mejor. Jé, yo me voy… sayounara! –Dice despidiéndose
Ranma-chan con un gesto de su mano.
-Espera jovencita, tengo lo que usted
necesita! –dice con cara de misterio el viejo.
En el dojo de
los Tendo se ve a un jovencito muy concentrado, en
posición de loto, leyendo un documento,
a su lado se encuentra una bolsa adornada con una linda cinta rosa.
-Ese viejo, cree que me voy a creer esta idiotez
–murmura Ranma mientras se concentra más en el desgastado papel.
-El resultado se vera cuando florezcan
los sakura… mmmmmmmmm… Jé, esto es tonto, de seguro se la pasa estafando a las
jovencitas con estas… -Dice Ranma mientras continua leyendo el documento –y
obtendrás lo que deseas.
Ranma deja el documento en el suelo y de
un salto queda de pie, toma la bolsa con el listón rosado y mira su interior.
-Están todos los ingredientes ya
mezclados– Toma el papel y vuelve a leerlo –Solo tengo que lanzar un puñado
para que se aspiren los polvos… y esperar que los sakura
florezcan… si ya estamos en primavera de seguro ya florecieron.
-Que floreció?
–pregunta despreocupada una chica de cortos cabellos azulados.
-Los sakura
–contesta Ranma nervioso mientras esconde ágilmente la bolsa y el documento.
-no, aún no florecen, se han tardado más que
otros años, aunque… de seguro pronto florecerán. –Akane lo mira curiosa –Porque
el interés?
-Jé, solo me
preguntaba… Akane, te he dicho alguna ves que con ese
chaleco pareces gorila. –Contesta Ranma con una sonrisa socarrona.
Akane, roja de coraje, infla sus pulmones
para gritar el ya conocido “Ranma no baka”, mientras
hace aparecer de la nada un inmenso mazo de 50 kilos para enviar a Ranma esta
ves a un viaje redondo a china.
-RA… cof, cof, cof… -Tose Akane después de haber recibido un puñado de
un polvo que sabe exóticamente dulce.
-Que es esto? –Pregunta
Akane, mientras trata de sacar de su boca el polvo de color rosa.
-Je, nada,
Akane, solo jugo en polvo…. Jejejejejeje… parece que
tragaste suficiente, creí que con el tamaño de tu boca, un puñado iba hacer muy
poco –Ranma tentó su suerte.
-RANMA NO BAKA!!! –Gritó Akane mientras
incrustaba a Ranma en el suelo del dojo gracias a su
muy pesado mazo. –Eso te enseñara a mantener la boca cerrada –Susurra Akane,
mientras se dirige a las puertas del dojo.
-Marimacho!
–murmuro por lo bajo Ranma –A quien le interesa una kawaiikune
violenta, pecho plano y piernas gordas…
Ranma paro su discurso al observar la
bolsa con adorno rosa que aún conservaba en su mano. Una ligera sonrisa broto
de sus labios.
-Como sabré si los sakura
florecieron? –se preguntaba Ranma sentado sobre el
tejado, aún con el documento en su mano. –Este papel no dice nada. Solo que
obtendré lo que deseo… Donde estará Akane?
De un salto se dirige a la ventana de la
habitación de Akane, la cual golpea ligeramente para saber si ella esta adentro,
nada sucede. Ranma se inclina hacia la habitación, la ventana esta levemente
abierta.
-Jé… La marimacho esta dormida. –dice Ranma más relajado entrando
al interior de la habitación.
-Quien lo diría?
Dormida parece una chica. –Dice Ranma con esa carita característica de niño
inocente –Incluso, se ve tranquila…
El viento sopla cada ves más fuerte, las
hojas de los árboles se mecen como bailándole al sol que pronto se ocultara dándole
paso a la luna de reinar el cielo. Mientras en una habitación un muchacho vela
el sueño de una jovencita. El atardecer hace lo suyo llenando los espacios de
colores anaranjados, dando luminosidad a los rasgos durmientes de Akane haciéndola
preciosa a la vista del único espectador que no quita sus ojos de ella.
-Kawaii
–Murmura Ranma con una voz ligeramente más ronca, mientras se aproxima
lentamente al borde de la cama.
La muchacha dormida suspira. Una ligera
sonrisa aparece en los labios de Ranma.
-Akane… -suspira el chico, acercando su
mano a la cara durmiente de Akane, suavemente acaricia su mejilla y se detiene
al rozar levemente sus labios. Lentamente retira su mano del suave calor de
Akane.
Ranma se sonroja al llevar furtivamente
la mano que hace poco rozara los labios de Akane a sus propios labios en una
petición muda de los deseos más secretos del joven.
Un Ranma sonrojado se inclina más cerca
de la joven durmiente, con su respiración visiblemente afectada, su corazón
latiendo velozmente en su pecho y sus labios ligeramente abiertos, sus ojos ocultos
por su flequillo.
-Akane… Yo… -Dice el muchacho en un
susurro casi inaudible. Su mano acaricia nuevamente la mejilla de la única a la
que considera suya, sus dedos tiemblan al rozar la comisura de los labios de la
chica.
Se inclina un poco más, haciendo posible
que sus sentidos alterados enloquezcan al sentir el dulce olor del cabello de
la joven.
Ranma levanta su cabeza, sus ojos
cerrados con la única intención de
controlar un poco sus emociones, la chica que placidamente sonríe en su sueño
lo esta volviendo loco. Ranma muerde instintivamente su labio inferior, al
sentirse lleno del olor de ella. Él vuelve a posar su vista en ella, sus ojos
por fin visibles muestran un color azul cargado de un brillo cobalto que se
intensifica cuando este observa los labios durmientes, ojos de un chico
completamente enamorado.
-Aishiteru…
-susurra una Akane durmiente –Aishiteru… Ranma.
Ranma abre sus ojos sobremanera tratando
de procesar lo que su pequeña princesita a susurrado
en sueños, con su corazón latiendo a mil y una voz ligeramente mas aguda
contesta:
-Yo también… yo también.
En las afueras de Nerima
se observa un espectáculo único, la gente maravillada mira hacia los bosques
para ver a los sakura en flor.
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Arigatou por leerlo!!
Alfauny.
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